El suelo radiante.

Cuando hablamos de la calefacción pensamos normalmente en los radiadores o los aires acondicionados, pero también hay otro tipo de calentar nuestro hogar y ese es el suelo radiante.

Este tipo se basa en la instalación de las tuberías de agua por debajo del suelo, por lo que el agua caliente que pasa por estos tubos, calienta el suelo y el calor termina calentando el ambiente. 

Es, probablemente, el sistema más eficiente y a la vez confortable. Nos permite dejar las habitaciones despejadas de radiadores, por lo que es más estético. Cuando se instala en suelos de piedra, terrazos, etc, acumula el calor más rápido y se calienta antes. Hay menos riesgo a dañarse con este sistema que con otros. Y se puede utilizar mediante energías renovables.

Pero, también tiene sus inconvenientes. Por ejemplo, la instalación es bastante cara comparado con los otros tipos; a la hora de instalarlo, se va incrementando el pavimento; necesita un equipo de generación de calor, por lo que hará que la instalación sea rentable o no; y es una instalación complicada. 

Aquí dejo un vídeo corto en el que se muestra como se instala.